Parece mentida como un instante puede cambiar tu vida, y
como un recuerdo puede perseguirte por más tiempo que haya pasado, parece
mentida como des de aquél día en que deje de tenerlo sigo pensando y recordándolo
en cada instante de mi día. Porque su lugar jamás podrá ser remplazado, porque cuando miro en el pasado me veo ahí con el y
quiero regresar a esos instantes a su lado.. de momento mi reloj no ha
avanzado, mientras lo que me rodea cambia yo sigo anclada ahí, en esa pequeña
historia de amor, afeándome a su recuerdo. Vivo sumergida en un mar de mil
recuerdos, en recuerdos que debería olvidar, o más bien olvidar lo que me hacen
sentir. Pero sigo queriéndolo y sigo queriéndome despert entre sus brazos y
sigo queriendo que sean sus labios los que dibujen sonrisas en mis labios,
porque con el pude acariciar a eso que llaman felicidad. En cambio aquí
sentada, no siento nada parecido a ello. Tan solo siento la añoranza que me
provoca su recuerdo y las lagrimas que caen como si nada por mis mejillas,
porque lo que cuesta ahora es mostrarme al mundo con una sonrisa y no con
lagrimas, porque el reflejo de mi alma son las lagrimas que derramo cada noche
al dormirme y no aquella chica que intenta esbozar sonrisas para demostrar al
mundo que es fuerte, cuando en verdad esta rota en tantos pedazos que no sabe
ni por donde empezar a reconstruir-se. Porque su ausencia mata mi ser.
Sabes? soy aquella que te sigue anhelando aunque sepa que tu
no lo haces, soy aquella que des de que te vio te quiso des del primer
encuentro, soy aquella que cada noche des de que te perdió sigue llorando, soy
aquella que te ama como nadie más lo hará y soy aquella que en ti encontró el príncipe
que tanto busco y también soy aquella que a pesar de saber que no la recibirás
con una sonrisa quiere coger las riendas de su vida, despegar en un avión,
acortar la distancia física que nos separa i ir al lugar en que te encuentras
en este instante, porque quilómetros me separan de ti y puedo acortarlos en un
instante pero tu corazón, jamás lo alcanzaré, y ahí esta esa pequeña
diferencia...
Tequiero. Aunque no seas quien conocí en aquel café, aunque
hayas cambiado yo sigo aquí, y aunque ahora no me hables yo mantengo la promesa
de que estaré aquí para ti cuando vengas o me necesites, porque siempre lo he
estado y así será. Llámame loca si es necesario pero soy así de estúpida.
En ningún otro lugar, en ningún otro abrazo puedo notarme
como me sentía contigo, en ningún otro beso puedo perderme de la misma forma
que lo hacía contigo y es más, mi droga eres tu y solo tu. A pesar de que se
que nadie va a poder hacerme sentir como lo hacías tu tan indefensa y a la vez
tan luchadora por tu amor, sé que no debo comparar pero las cosas son así. SIn
embargo, los días pasan, la vida se me escapa y yo sigo aferrada a nuestra
historia, al recuerdo que más veces hace que me pierda en un mar de lágrimas,
quizás por estúpida, tal vez por ingenua, pero es así y no es de otra forma. ¿porque
sigo esperando sentada?
Por el simple hecho de que tequiero sin razón alguna, porque
si alguna vez pudiera escuchar mi cabeza y no mi corazón y pusiera la razón por
encima de mis sentimientos, sé que tu estarías fuera de mi vida más tiempo del
que ya llevas... porque hemos acabado siendo dos desconocidos con mil y un
recuerdos en común, porque ahora, ya no eres quien conocí en aquel entonces... y
yo quizás ya no sea la misma niña que construida castillos en el aire como esos
días a tu lado, pero si algo se es que los instantes contigo son los más
bonitos, a pesar de que no los mire con una sonrisa sino con añoranza y
tristeza.
Pero a veces al cerrar los ojos puedo sentirte, notarte, y
tal vez solo tal vez vuelvo a notar esa calidez que reconforta mi corazón. Tequiero
tanto..
Justamente hoy hace tres meses que deje de recorrer las
calles junto a ti.
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